Una mirada optimista

Después de bastante tiempo de inactividad, y tras el periodo estival por fin, recobramos el pulso. A iniciativa de un colaborador se ha actualizado el blog, producto de sus inquietudes nos trae este texto con un mensaje de esperanza con las fuerzas renovadas para asumir nuevos desafíos.

UN PUEBLO, UN DESTINO

Sucina es esa entelequia, que se contradice y se reafirma en un mismo gesto, capaz de procurar el mayor de los sentires y el peor de los desafectos, conciertos y desconciertos, generaciones y degeneraciones. El vivo ejemplo del potencial latente de las gentes de este pueblo, dormido en el letargo, se puede observar ilustrado en el transcurso de las recientes fiestas patronales, en las cuales, a pesar de los difíciles momentos económicos que se sufren, se ha producido una implicación ciudadana desconocida en los últimos años; gran numero de peñas, importante participación en todas las actividades del programa…en definitiva, hemos podido certificar que la cohesión entre los sucineros no es un utopía, sino que esta al alcance de nuestras manos.

El estruendo de la traca final nos induce a reflexionar, a pensar que el futuro es nuestro, porque las nuevas generaciones ansían ambiciosos proyectos de vida en este pueblo, es por ello que se hace necesario prolongar la inercia de compromiso y colaboración, es ineludible aprovechar ese sentimiento colectivo y no mutilarlo, pero para ello debemos de tomar conciencia de lo imperativo que resulta la regeneración de nuestra junta vecinal, que ha demostrado estar obsoleta, inoperante y desvinculada de las inquietudes de los sucineros.

La situación lo requiere, en un horizonte próximo la democracia una vez mas, nos pedirá auxilio, y no deberíamos de darle la espalda y obviar nuevamente su llamada.

¡Qué importa un día! Está el ayer alerto

al mañana, mañana al infinito,

hombres de España, ni el pasado ha muerto,

no está el mañana -ni el ayer- escrito."

Antonio Machado (El Dios Íbero - Campos de Castilla)

Un colaborador